Hotel del Sol
Servicios principales
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Wi-Fi gratis
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Servicios 24 horas
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Comida/Bebida
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Acceso para sillas de ruedas
Ubicación
El hotel Hotel del Sol dispone de un restaurante y depósito de equipajes. Se encuentra en el barrio Protective Town of San Miguel de San Miguel de Allende, a 10 minutos andando del Instituto Habla Hispana y a 10 minutos andando de atractivos culturales como la Casa de Ignacio Allende. Los huéspedes disfrutarán de un desayuno americano y del acceso a una terraza.
El hotel está a 10 minutos a pie del centro de San Miguel de Allende, cerca del Jardín Allende. Los lugares de interés natural más populares cerca del del Sol San Miguel de Allende son el Parque Benito Juárez (450 metros) y el Jardín Botánico El Charco del Ingenio (2 km). El Mirador El Caracol se encuentra a 2 km de distancia de este hotel. El aeropuerto más cercano es Intercontinental de Querétaro, ubicado a 90 km del Hotel del Sol.
Algunas habitaciones disponen de una terraza y un aparador, así como de un cuarto de baño privado. En los cuartos de baño los huéspedes tienen acceso a bañera y ducha a ras de suelo. Los cuartos de baño incluyen ducha adaptada y bañera, además de comodidades como toallas de baño.
Este alojamiento ofrece el desayuno en el restaurante. Puedes llegar a Las Cuatro Milpas y The Restaurant en 5 minutos a pie desde el hotel.
Reseña de un crítico de hotel
Recientemente tuve el placer de alojarme en el Hotel Del Sol durante un viaje a San Miguel de Allende, y debo decir que me dejó una impresión muy positiva. La ubicación es inmejorable, a solo unos pasos de la hermosa iglesia de San Miguel y del Museo Histórico, lo que nos permitió explorar la ciudad sin esfuerzo. La atención del personal fue excepcional; desde la recepción, todos fueron muy amables y dispuestos a ayudarnos con recomendaciones locales. Me encantó la habitación, amplia y muy cómoda, con toallas suaves y una cama que te abraza al dormir, algo esencial después de un día recorriendo la ciudad. Además, la variedad de almohadas fue un detalle que se agradece enormemente. Mención especial para los desayunos: un festín américano que nos dio energía para continuar con nuestras aventuras diarias. Aunque no utilicé la terraza ni el jardín, ambos espacios lucían encantadores y prometían ser un excelente lugar para relajarse al finalizar el día. Sin duda, ¡volveré!
